Novoa, Leopoldo

Leopoldo Novoa García nace en Salcedo (Pontevedra) en 1919. Hijo de un diplomático, a los
siete años realiza su primer viaje a América, donde comienza a dibujar, pintar y modelar. Regresa
a Galicia en 1929, influye en los movimientos artísticos de los años de la República, y en 1938 su
familia se traslada nuevamente a América, para residir en Uruguay hasta 1947, en que se trasladan
a Buenos Aires. Allí, con viajes constantes por todo el continente, el artista vive hasta que en
1965 se traslada a París, donde trabajará intensamente, aunque pasa largas temporadas en la paz
de Armenteira, cerca de Pontevedra. Las exposiciones se suceden, desde 1953, en Buenos Aires,
Nueva York, Punta del Este, Montevideo, Dublín, Madrid, Italia, Bélgica, París, Lima, Bogotá, Quito
y en Vigo y otras ciudades de Galicia. Ha participado en colectivas en todo el mundo, siempre como
nombre destacado de una tendencia informalista, absolutamente conceptual, de peculiaridad total,
en la que hay un afán de identidad entre espacio y tiempo. Está representado en Museos de Arte
contemporáneo de todo el mundo y en grandes instituciones. Novoa ha realizado grandes murales,
algunos de dimensiones excepcionales, probablemente de los más grandes del mundo, y tiene una
gran cantidad de obras integrada en arquitectura, en Uruguay, España, Francia. Esta expresión plás-
tica es consecuencia de una larga evolución simplificadora, que parte de un expresionismo intenso,
emparentable con algunos modos del gran uruguayo Torres García. Todo esto indica que la carrera de
Nóvoa es razonante, reflexiva, de lenta evolución hasta su última tendencia, encuadrable acaso en lo
que Carlos Areán definió como “escultopintura”. Visitó Uruguay en el presente año lectivo 2008.